¿QUÉ DEBEMOS SABER SOBRE LOS NUEVOS ANTICOAGULANTES PRADAXA Y XARELTO?
Recomendaciones para evitar accidentes graves.
Los nuevos anticoagulantes Pradaxa y Xarelto han irrumpido con fuerza sustituyendo en buena parte de los nuevos paciente diagnosticados de FIbrilación Auricular (Arritmia) al clásico Sintrom y a la Warfarina (Aldocumar).
Sin embargo este entusiasmo inicial hacia un medicamento más estable no se ha acompañado en muchas ocasiones de una amplia información al paciente sobre los beneficios y los inconvenientes de un producto que puede ocasionar serios problemas, tal y como las guías de tratamiento recomiendan.
¿Cuáles son las virtudes de estos nuevos anticoagulantes?:
Fundamentalmente su gran estabilidad. La no interferencia con la alimentación y la interferencia con muy pocos medicamentos.
¿Cuáles son los problemas que presentan?
A) No disponen de antídoto:
En primer lugar no debe olvidarse nunca que son fármacos anticoagulantes y que por tanto conllevan el mismo riesgo hemorrágico que el sintrom o la warfarina .
Sin embargo a diferencia de Sintrom o la Warfarina es de enorme importancia que el paciente sea consciente de que a día de hoy ninguno de estos productos dispone en la actualidad de un antídoto lo que genera no pocos problemas a la hora de establecer un tratamiento en situaciones de hemorragias graves.( por ejemplo Hemorragia Cerebral)
Por el momento los fabricantes están trabajando intensamente en la búsqueda de antídotos que puedan revertir la situación hemorrágica. Por lo que conocemos hasta la fecha y por las referencias publicadas parece ser que de los dos nuevos productos en el mercado, el Xarelto podría ser sensible al mismo antídoto que utilizamos para el Sintrom llamado complejo de protrombina ( Prothromplex o Behriplex).
El Pradaxa por el momento no ha mostrado ser sensible a ningún antidoto.
B) Alta frecuencia de abandono del tratamiento:
Al año de tratamiento un 21% de los pacientes lo abandonan, unos (el 11%) por intolerancia digestiva; el resto por diversas razones , entre ellas una escasa conciencia de que son imprescindibles para evitar una embolia.
C) Precio elevado.
La seguridad Social no los admite más que como segunda opción si fracasa la Warfarina o el Sintrom, y ésta es la recomendación de consenso de los comités científicos de todos los paises .” se deben utilizar SOLO si hay problemas con el Sintrom. No como primera opción.”
Recomendaciones para usar el PRADAXA o el XARELTO con seguridad:
Tomar la dosis prescrita sin fallos , porque la vida media corta de estos productos deja al paciente sin protección frente a embolias, en muy poco tiempo.
¿Debo hacerme algún tipo de control?
El hecho de que sean estables no quiere decir que se prescinda de todo tipo de controles.
En los estudios realizados para aprobar estos medicamentos se realizó en los pacientes un control inicial para descartar problemas de la Coagulación y se comprobó que el paciente tenía una buena función renal y hepática.
Estos controles se realizaron:
1º) al inicio del tratamiento,
2º) al final de la primera semana y
3º) al final del primer mes, continuando de forma permanente realizando un control trimestral.
¿Que utilidad tiene este seguimiento?.
Fundamentalmente el concienciar al paciente de que está tomando un fármaco muy importante y de alto riesgo, puesto que puede evitar hasta un 80% de las Trombosis y Embolias.
Mantenerle alerta del riesgo de Hemorragias y finalmente hacer que el cumplimiento del tratamiento se mantenga sin olvidos.
La decisión de NO realizar controles trimestrales conlleva inevitablemente el abandono del tratamiento en un 50% pacientes. Estas son las cifras que ha detectado la OMS y otros estudios independientes, tanto para estos nuevos anticoagulante como para cualquier tratamiento crónico que no se controle.
¿En qué consisten estos controles?
Pues simplemente en:
A) un Hemograma con el cual podremos comprobar si el paciente tiene hemorragias ocultas, evitando llegar de forma silenciosa a una anemia que puede ser muy grave máxime en pacientes con un problema cardíaco.
B) una sencilla medida de Creatinina que nos informará sobre si el paciente mantiene un buen funcionamiento renal o comienza tener un cierto grado de insuficiencia renal, muy frecuente a partir de los 65 años, que es precisamente la edad en que la mayor parte pacientes requieren de tratamiento anticoagulante.
Este es probablemente uno de los puntos más importantes dado que una disfunción renal, incluso leve, puede dar lugar a un cambio en los niveles activos del anticoagulante y producir un alto riesgo hemorrágico.
C) un Tiempo de Protrombina y un APTT que nos informarán de si el fármaco esta siendo ingerido correctamente.
Se trata de unos análisis trimestrales de muy bajo costo y garantizan una alta seguridad.
Es importante tener en cuenta que en el primer año de administración de estos medicamentos, en los países en los que se inició su uso sin tener en cuenta controles como fue Nueva Zelanda, Australia y Japón, aparecieron gran cantidad de casos de muertes por hemorragia cerebral.
A pesar de esta grave experiencia, en nuestro país se vienen observando casos en los que que se inicia el tratamiento con estos nuevos fármacos sin tomar en cuenta estas medidas de control y formación del paciente.